
Ir a el Tridente, no es solo ir a la montaña, si no
también es gozar espectaculares vistas
del valle de Barreal, observar, aprender, de los restos de las culturas aborígenes de la zona, y traerse un recuerdo imborrable del cordón de Ansilta desde la fascinante vista
de su cumbre. Vista sin igual de los picos 7 al 2, sin tener en cuenta que
tenemos las dos moles más grandes...