M P: Capitulo 10
Campamento Torres – Serón
La
alarma sonó a la las 6 de la mañana. Nuevo día en el parque. Tras un
gran desayuno que contaba con una buena taza de leche con chocolate caliente y
galletas, organicé mi mochila, guarde la carpa y partí lleno de energía y con buen humor.
La vuelta desde el campamento base, siendo
esta en declive, junto con la belleza del paisaje, de la mañana a puro sol, del
bosque, del rio zigzagueante, que baja por ese hermoso valle, terminó
confluyendo en una mañana muy pero muy llevadera.
El campamento torres se encuentra bajo el bosque, a la derecha. |
Bajando hacia hotel Torres. |
Tarde una hora menos que en la ida. Me
aprovisioné de agua la última vez que cruce el río Ascencio y continúe hacia el
camping Las torres. En este punto me costó un poco encontrar el inicio del
camino hacia Serón, pregunte y me indicaron el camino. Este, al comienzo pasa
cerca de una cantera de ripio, ya que es el mismo camino, excepto que se desvía
en una curva ascendente enfrente del ingreso a esta.
Unas de las cosas admirables del parque,
que se disfruta con el corazón, además de su impresionante cantidad de
ecosistemas, es el poder tener y observar la fauna tan a mano, en cantidades
abundantes, a las cuales es posible un inusual acercamiento, lo que genera en
si un mayor disfrute de la misma.
Después de esta primer subida corta, se
tiene un linda vista hacia la zona del camping, alcanzando todavía a divisar a
lo lejos el lago Nordernskjöld. Desde este punto ya es factible cruzarse con
innumerables liebres a lo largo del camino.
El camino de vehículo se convierte en un
sendero bien marcado, que transcurre a lo largo del pie del macizo rocoso
ubicado a nuestra izquierda. Esta zona está dominada mayormente por praderas
verdes y pequeños matorrales que no dejan de generar un hermoso paisaje potenciado
en primavera por sus flores.
Apenas arrancamos el sendero. |
El hermoso Monte Almirante Nieto. |
Antes de dar la vuelta al macizo rocoso y
entrar al valle del rio Paine, ya el cuerpo me estaba pasando factura, empezaba
a sentir signos de agotamiento y eso que todavía no llevaba ni la primer hora
de viaje del las 4hs que marcaba el mapa hasta el campamento Serón.
En si el camino no presenta dificultades,
tiene poco desnivel, pero sus 9 km restantes me iban hacer sufrir.
La primer hora es tranquila, una vez que se
entra en el valle del río Paine, se empiezan a observar los primeros signos
terribles de los incendios, las grandes pérdidas de zonas boscosas
irrecuperables. El camino seria 3 veces más hermoso si no hubiera sufrido tan
lamentable hecho. En parte, el camino fluctúa entre intervalos de zonas
boscosas y zonas afectadas, apareciendo de tanto en tanto zonas de
reabastecimiento de agua. Este sector se volvió un poco tedioso debido a las
grandes distancias con barro, haciendo más lento el ritmo, y sumando cansancio.
De repente el sendero se vuelve a convertir
en camino de vehículos, que prácticamente nos acompaña hasta el arribo, en Serón. En esta zona ya
tome un descanso mayor, en el cual aproveche a almorzar mi estupenda lata de
atún.
Con 2hs transcurridas desde el camping Las
Torres el camino empieza a descender hacia las planicies del rio Paine,
mejorado el paisaje y cruzando varios arroyos entre bosques añejos
hermosísimos.
El clima empezó a cambiar de apoco, variando
entre nubes bajas y sol, a esta altura me dolía toda la espalda, ya me costaba
hasta sacarme la mochila. Me debatía si parar o no, ya que no quería perder
ritmo, ni enfriarme durante los descansos, lo que sería peor.
Lo que antes era un bosque. |
Decidí realizar una nueva parada, tomarme
el tiempo necesario para descansar cerca de un arroyo rodeado por arboles y
espacios verdes llenos de pequeñas flores amarillas. Escuche un sonido, un golpeteo,
pude divisar una hembra carpintera en un árbol a muy poca distancia del suelo,
tuve la suerte de poder acercarme casi a dos metros de distancia sin que se
volara y poder disfrutar con asombro de ella, ya que no estoy acostumbrado a
ver ese tipo de aves. Como si fuera poco empezó a caer nevisca, traída por el
viento desde alguna nube cercana, ya que el cielo se encontraba entreabierto,
bastante soleado. No sé si por el cansancio, el sufrimiento, los sentimientos a
flor de piel y el hermoso paisaje, de
repente todo eso se combino para ser un momento mágico, único.. un momento inolvidable.
Continuando, el camino se introduce por fin
en una planicie bordeada por el rio Paine, prácticamente es todo horizontal. Presenta
algunas señalizaciones naranjas pero de manera muy discontinua, en ciertos
momentos se separa del camino vehicular, y al estar poco marcado, se dificulta
volver hallarlo. Se cruzan un par de alambrados y campos con animales sueltos.
Esta parte del camino volvió a ser tediosa,
por el tiempo perdido en encontrar las formas de cruzar arroyos, bastantes
caudalosos, recordando que en una zona hay que bordear el arroyo unos 200m
hasta llegar al cruce, todo este sector sin indicación y sin camino claro,
además de la corta precipitación de agua nieve que me hizo parar y colocarme
todo el equipo impermeable solo por 10 minutos.
Río Paine. |
Carancho. |
Siendo alrededor de las 16:00 hs, muy
exhausto y de mal humor por fin llegue al campamento Serón. Este cuenta con una
edificación austera, si se las compara con los otros campamentos privados, en
la cual se tienen la posibilidad de reservar una cama, alquilar saco de dormir, carpa y colchoneta,
desayunar y cenar. Posee ducha y baños, en ese momento estaban terminando 2 baños nuevos separados del refugio.
Dato importante; en este se pude dejar la basura.
El sitio de acampe se encuentra detrás del
edificio, es una zona abierta prácticamente sin árboles con algunas mesitas
dispersas en el sector, muy desprotegida en caso de vientos fuertes. Cobran
$4000 ch por su uso.
Me instale, me relaje, estire los músculos,
cene con abundancia y a eso de las 18:00 hs ya estaba acostado en la carpa
leyendo. Al día siguiente me esperaba una hermosa caminata de 19 Km.
Refugio Serón. |
Capitulo 11: Campamento Serón Dickson
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