Puno y las islas flotantes.

B P: Capitulo 12: Islas flotantes de los Uros  

 
Al salir de Copacabana, (jueves 17)  a media hora de viaje se llega a la frontera que esta antes de un pueblito llamado Yunguyo , tampoco hay complicaciones en esta frontera, solo se hace el papeleo, ni los bolsos revisan, es todo bastante rápido;  guarden $1 bob para sacar fotocopia a la visa, se la sellan y se la quedan ustedes, sino van a tener que pedir prestado y tal vez así conozcan a un amigo tucumano que lo va acompañar buena parte del viaje, así se dan las cosas. Los que tienen pasaporte no les hace falta, tampoco les conviene cambiar plata aquí, esperen llegar a la terminal de puno, hay mejor cambio. 

La mayoría del recorrido transcurre bordeando el lago Titicaca, pasando por campos sin alambrar como en todo Bolivia, cosa que me llamo mucho la atención, estos deben pertenecer a las comunidades. También  me llamo la atención que en la mayoría de casas  que uno ve durante el camino, tienen la vaca atada, o las vacas, el lechón o las  llamas,  otra cosa destacable es que se ven a las cholas trabajando a la par de los hombres como por ejemplo: en obras de excavación de cañería, generalmente la construcción y esos trabajos pesados lo realizan hombres.

Se pasan por bastantes pueblitos, algunos pintorescos, los paisajes siguen siendo lindos.

La ciudad de Puno es grandecita, la entrada a esta no es muy linda, no se la parte céntrica, no  la conocí. La terminal es bastante grande, tiene en el segundo piso unos locales para comer, se come bastante bien. Lo único malo de la terminal son los pesados de los operadores turísticos que te acosan a más no poder para venderte el viaje o el tuor por las islas, se pelean entre ellos adelante tuyo y encima se la tiran de calientes, cuando pueden te cobra demás, metiendo escusas, como que te tienen que cobrar el ingreso a las islas o alguna otra historia. Generalmente caen los europeos, asiáticos y estadounidenses. Lo mejor es estar informados de los precios para distinguir cuando te están estafando.

Nosotros llegamos tipo 15:30hs, cambiamos un poco de soles, contratamos un tour por la isla a una persona que nos llevo desde la terminal en una combi hasta el puerto,  con el tour incluido por $10 sol. Guardamos las mochila en la terminal, en el lugar que nos indico la persona y partimos rumbo a las  islas Flotantes.

Lo mejor del tour vuelve a ser el paisaje,  ya que apenas uno llega a las islas se ve que todo está montado para el turismo, es mas cuando uno escucha discutir al encargado del tour por teléfono, diciendo que lo mandan a islas que no hay gente, lo termina confirmando, aparte de esto no hay que ser muy despierto para darse cuenta  en la isla, cuando uno llega, que la cantidad de personas y camas no concuerdan, y lo que es supuestamente la cocina está llena de telas de araña. En fin de todas formas hay que tratar de disfrutar.

AL llegar lo recibe el encargado de la isla que les cuenta un poco la forma de vida y todas las catástrofes que pasan a diario, la cantidad de niños que se ahogan yendo a la escuela, o muerte  por enfermedades, etc.,y  la forma de realizar las islas , a continuación  la gente realiza un baile y cantan, para luego arrastrarte con los niños de la mano al mercedez  benz, para que des una vuelta en un barco realizado de totora por $10 sol.  Este es el curro, para todo esto está armado el discurso que dan en la isla.

El Mercedes Benz

Una vez terminado todo el circo, te llevan a otra isla, que en esta si se puede decir que por lo menos una familia vive, o alguien, en la cual se venden artesanía. Hay un pequeño comedor, en el cual compramos unos pastelitos fritos bastante ricos. Así termina el tour por las islas de los Uros.

Regresamos a la terminal y compramos pasaje a Cosco por $30 sol, (7 hs de viaje aproximadamente), se tiene que pagar el derecho de terminal también $1.5 sol, el uso del baños $0.5 sol. El bus salía a las 21 hs, así que mientras esperábamos, cenamos en el segundo piso por $10 sol, era un menú turístico bastante rico.

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Terminal de Puno

Con la panza llena y el corazón contento partimos a Cuzco: ¡increíble ciudad! 

Capitulo 13: Cusco